Para trabajar con el desarrollo de la calidad, es necesario contar con un sistema de documentación y seguimiento diseñado específicamente para el trabajo en el ámbito de la juventud y claramente vinculado a indicadores y objetivos de calidad mensurables. Solo de esta manera los trabajadores juveniles pueden obtener información relevante y estructurada para el análisis y la reflexión, evitando especulaciones y basando sus decisiones en hechos.
El seguimiento de los resultados cualitativos debe centrarse en la recopilación de información de los jóvenes; Quiénes son (para garantizar que no se excluya a ningún grupo) y cómo perciben los diferentes grupos el trabajo juvenil (por ejemplo, si han participado en la creación, la planificación, etc. y han aprendido, etc.), es decir, si el trabajo juvenil cumple los principios básicos.