Sabemos por la investigación que los jóvenes están interesados en cuestiones sociales y políticas, incluso cuando no participan en la política de partidos. Sus voces también son cruciales para informar a la política sobre sus necesidades, experiencias e ideas, así como sobre cómo deben diseñarse las estructuras y los procesos para abrirse al compromiso político de los jóvenes.
Incluso si a veces se pide a los trabajadores en el ámbito de la juventud, o se siente la necesidad, de hablar en nombre de los jóvenes, siempre deben tener en cuenta que se trata de una segunda mejor solución y esforzarse por ser reemplazados por los propios jóvenes.